Lenguaje inclusivo

Se propone el uso del lenguaje inclusivo y no sexista como práctica en la comunicación del municipio

Las concejales de Proyecto Caroya, Melisa Díaz Heredia y María Cecilia Migotti, presentaron su propuesta que insta al municipio a utilizar el lenguaje inclusivo en todas sus comunicaciones.

El proyecto propone que en todas las dependencias municipales, del Poder Ejecutivo, Poder legislativo y órganos de control del Municipio de Colonia Caroya, se debe fomentar la utilización del lenguaje inclusivo, no sexista, no excluyente, no difamatorio y/o no discriminatorio como práctica lingüística escrita, oral y audiovisual.

El lenguaje  inclusivo y no sexista aquel que no oculta, no subordina, ni excluye a ninguno de los géneros y considera, respeta y hace visibles a todas las personas, reconociendo su identidad de género. El Estado Municipal de Colonia Caroya, como garante de la igualdad de derechos, oportunidades e igualdad de géneros, debe promover la utilización del lenguaje inclusivo.

“Creemos que es necesario de-construir la formulación histórica desde el lenguaje que proyecta modelos culturales androcéntricos que sitúan la mira masculina como universal y generalizable a toda la comunidad. Este uso del lenguaje sexista y discriminatorio contribuye a reproducir relaciones asimétricas, jerárquicas y desiguales. Con este proyecto de promoción y concientización del lenguaje inclusivo creemos estar construyendo una sociedad más igualitaria, más justa. Por lo tanto consideramos que es imprescindible que todos los textos, escritos, orales o audiovisuales, reproducidos desde el municipio de Colonia Caroya, expresen su contenido desde una perspectiva igualitaria y de igualdad de género. No existe justificativo para el uso del lenguaje excluyente o discriminatorio.”, afirma Díaz Heredia.

Dice el cuerpo del proyecto presentado que el lenguaje es el instrumento a través del cual expresamos nuestros pensamientos, nuestras ideas y nuestra forma de concebir el mundo, y es, por tanto, el reflejo de la cultura de una sociedad en un determinado momento. Cuando aprendemos una lengua, ésta no sólo nos permite comunicarnos sino que adquirimos un conjunto de conocimientos, valores, prejuicios, estereotipos, actitudes etc. que nos sirven para organizar e interpretar nuestra experiencia, para construirnos como personas.

Producto de prácticas sedimentadas que se han consolidado a lo largo de la historia, se fue construyendo una sociedad patriarcal que extiende y perpetúa las desigualdades de género. Éstas han conducido a una real desigualdad de oportunidades que atentan contra el desarrollo integral de las personas. El lenguaje no es un campo ajeno a esto, sino que por el contrario es un espejo sobre el que se reflejan las formas de pensar, sentir y actuar de una sociedad.

El proyecto será tratado en las comisiones correspondientes.